'Las negociaciones de Naciones Unidas sobre clima en Varsovia comenzaban esta semana rodeadas de malas noticias. Malas noticias en cuanto a subida de las emisiones de gases de efecto invernadero, el futuro de los más vulnerables y las bajas expectativas. La peor noticia sin embargo venía de Filipinas. El tifón Yolanda asolaba el país asiático al mismo tiempo en que se abrían las puertas de la cumbre. Las malas noticias, a pesar de que parezca una contradicción, representaban un rayo de esperanza.'